Historia

El Colegio Parroquial San Gabriel de la Dolorosa, siempre ha estado unido a la comunidad que lo rodea y de forma especial a la Parroquia San Gabriel de la Dolorosa de donde toma su nombre, la cual fuera creada en septiembre de 1977 por el entonces arzobispo de Medellín Monseñor Tulio Botero Salazar.

Por la acción pastoral de los distintos sacerdotes que pasaron, la comunidad parroquial cada día fue creciendo en población y también en necesidades. Fue así como en 1991, el Presbítero Jorge Mario Acosta Gómez, dispuso de dos salones pastorales para la atención de niños menores de 7 años que no contaban con los recursos para comenzar su formación inicial, surgiendo de esta forma el Preescolar San Gabriel de la Dolorosa; el cual, para el año 1998, ya ofrecía la educación Básica Primaria, por tanto, con las respectivas aprobaciones y con un Proyecto Pedagógico Institucional definido, cambia el nombre a Colegio San Gabriel de la Dolorosa.

En el año 1999, asume como rector el Presbítero Guillermo León Ramírez quien, no sólo consigue continuar con los procesos de formación integral desde el ideario de la educación católica, sino que da inicio a la ampliación del Colegio en un edificio de tres plantas y nueve salones para dar cabida a los 160 estudiantes existentes.

En enero de 2004, es nombrado rector el Presbítero Héctor Castrillón Sánchez quien, motivado por la necesidad de continuar una formación integral católica a los estudiantes y con el apoyo de toda la comunidad, consigue la aprobación para implementar los estudios de Básica Secundaria en el Colegio. Al ampliarse la oferta educativa, se vio la necesidad de ampliar la planta física del Colegio, por lo tanto, se adquirieron unos lotes vecinos al templo parroquial, en los que fue posible construir una edificación de cuatro pisos con nuevos salones y espacios para la realización de los distintos proyectos pedagógicos.

En marzo de 2013, llega como rector el Presbítero Raúl Fernando Vásquez Monsalve, quien hace una revisión de algunos aspectos del Proyecto Educativo Institucional, sobre todo en el aspecto de la fundamentación legal y el enfoque pedagógico, proponiendo un modelo pedagógico conectivista. De igual forma, es durante la rectoría del Padre Vásquez, que se pasa de una administración independiente del Colegio a ser administrado financieramente por la Fundación Arquidiocesana para la Educación, creada en la Arquidiócesis de Medellín para reunir todos los colegios arquidiocesanos.

En enero de 2019, asume como rector el Presbítero Magíster José Fernando Marín Flórez, quien en primer lugar busca fomentar los lazos para construir verdadera comunidad educativa. Con la participación activa de toda la comunidad educativa, mediante la metodología de “mesas de trabajo”, logra hacer una revisión y ajuste a todo el Proyecto Educativo Institucional en cada uno de sus componentes, haciéndolo más coherente y pertinente de acuerdo a las necesidades y exigencias propias del momento.

A su vez, el Padre Marín, identifica algunas falencias en la planta física que son solucionadas con brevedad. Independiza las oficinas del Colegio de las de la parroquia, generando un espacio moderno y acogedor para el Colegio. Se crean y se dotan nuevos espacios pedagógicos tales como la sala de sistemas, la sala de lectura y la biblioteca.

Nuestra Institución

El Colegio Parroquial San Gabriel de la Dolorosa, es una Institución sin ánimo de lucro, de carácter católico arquidiocesano, con domicilio en la Ciudad de Medellín, Antioquia. Forma integralmente a los estudiantes, prestando servicio educativo inclusivo y de calidad en los niveles: Preescolar, Básica Primaria, Básica Secundaria y Media Académica. Fomenta en sus acciones cotidianas el progreso y bienestar de la comunidad educativa. Desde su enfoque axiológico hace especial énfasis en formar al sujeto de hoy para que humanice su mundo, produzca cultura, transforme la sociedad y construya su devenir histórico. En su cotidianidad, el Colegio posibilita la reflexión crítica de las realidades de cada miembro de la comunidad educativa, las transversaliza con el Evangelio del Señor Jesucristo, encontrando el sentido de las mismas, para viabilizar un sentido profundo de trascendencia de la propia historia.

A mediano plazo el Colegio Parroquial San Gabriel de la Dolorosa, será reconocido en el entorno como modelo de institución educativa por su formación humana integral de perspectiva católica; por la excelencia académica, la coherencia de los programas formativos con enfoque inclusivo, así como por sus principios y valores centrados en el Evangelio. A nivel interno, se vivenciará una cultura de disciplina, estudio, respeto por la diferencia y solidaridad en toda la comunidad educativa potenciando la construcción trascendente de cada uno.

La misión y la visión del Colegio Parroquial San Gabriel de la Dolorosa, se ve evidenciada en la práctica cotidiana de sus principios institucionales, los cuales están presentes en los programas y proyectos que se orientan hacia toda la comunidad educativa.

Estos principios son:

  • Todas las acciones educativas están orientadas a la formación integral de los estudiantes, desde una perspectiva de educación católica, que los lleva a la consciencia de sí mismos como sujetos en búsqueda de la trascendencia en coherencia con los valores del Evangelio.
  • Desde el enfoque de Educación Católica, se anuncia a Jesucristo, en un clima de convivencia humana donde Él es el fundamento, que con sus palabras y acciones invita a construir la propia existencia en sentido responsable y solidario con los semejantes, posibilitando de esta forma la construcción de la cultura.
  • Se tiene como fundamento el respeto por la dignidad humana de cada uno de los integrantes de la comunidad educativa, a través de la organización de programas y proyectos incluyentes, participativos, pertinentes y flexibles.
  • La calidad en el servicio educativo es eje rector en los programas y proyectos ofrecidos por el Colegio, en los que se desarrolla el pensamiento crítico de los estudiantes y su capacidad para llevar a cabo procesos investigativos que les permitan apropiarse de su realidad.
  • Desde el conocimiento científico, la investigación, el uso de recursos tecnológicos disponibles, en los programas y proyectos se propende por la búsqueda de la verdad como anhelo histórico del hombre.
  • Como Colegio arquidiocesano, se promueve la fidelidad a los principios y valores del Evangelio, los principios morales y éticos en unidad a la Iglesia Universal y la particular de Medellín, los cuales se promueven en una acción pastoral práctica.
  • La comunicación, es fundamental para la prestación de un servicio educativo con calidad; por tanto, en todo momento se buscan las buenas relaciones interpersonales con todos los miembros de la comunidad educativa, basada en el diálogo, la concertación, el respeto mutuo, la convivencia y la solidaridad.
  • Se propicia un ambiente educativo y laboral sano, agradable, alegre, positivo, asertivo y responsable en la ejecución de todos los planes, programas y proyectos; desde esta perspectiva, se posibilita la formación permanente de los docentes con miras a la cualificación de su profesión.
  • El cuidado y protección del medio ambiente es prioridad; por tanto, en todos los niveles de formación se crea una consciencia ecológica que ayuda a mantener un ambiente sano en los diferentes espacios donde se encuentren.
  • Se promueven los valores democráticos, cívicos y culturales que lleva a los estudiantes a reconocerse como miembros de una sociedad específica en la cual se debe desenvolver y a la que debe aportar como miembro activo de la misma.
  • Trascendencia: Todo el accionar de los diferentes miembros de la comunidad educativa están fundamentados en el Evangelio, norma suprema de vida, que mediante la oración y sobre todo la acción, se dignifica su existencia y la de quienes lo rodean.
  • Disciplina: Se reconoce como valor fundamental la disciplina en cada uno de los procesos que se lleven a cabo en el Colegio, sean de orden académico o de convivencia, pues sólo con la práctica de este valor se pueden hacer realidad las expectativas y deseos personales e institucionales.
  • Felicidad: El anhelo fundamental de cada ser humano es poder construir su vida como la ha soñado, esto lleva al sentido de plenitud de la existencia. En cada proceso del Colegio, se busca que los distintos miembros de la comunidad educativa puedan vivir este valor no de forma pasajera sino como construcción permanente de la cotidianidad.
  • Excelencia: Desde la práctica del hecho educativo y en cada lugar donde se haga presencia existencial, se busca que los miembros de la comunidad educativa pongan en ejecución sus habilidades, actitudes y aptitudes para realizar cada proceso con altos índices de entrega y dedicación lo que redunda en la satisfacción de hacer las cosas bien hechas y con amor.
  • Solidaridad: Compromiso social que mueve a cada uno de los miembros de la comunidad educativa para salir de sus propias comodidades y seguridades para atender las necesidades de quienes lo rodean como vivencia concreta del Evangelio.